«Perseguidos, pero no desamparados: derribados pero no destruidos»
(2 Corintios 4:9)
«Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo». (San Juan 16: 32-33)
Señor Dios, Padre Nuestro, hoy te pedimos por nuestr@s herman@s perseguid@s. Condenador por amarte, por anunciar la Buena Noticia que un día tu hijo Jesús nos trajo al mundo. Permanece en ellos, como lo hiciste en tu hijo Jesús, dales la luz necesaria para vender al mundo; para vencer a ese mundo que condena el amor.
Haz que su dolor impulse nuestra generosidad y nuestro valor, para ser defensa de sus vidas. Os compartimos el enlace a la página web de ayuda a la iglesia Necesitada, donde podéis encontrar diferentes formas de colaborar:
https://www.ain-es.org/Default.aspx